Se trata de un elemento importante en la composición de las habitaciones. Como es bueno pensar en ellos, ¡te proponemos algunas ideas fáciles de aplicar!
Los cabeceros nos brindan comodidad, por ejemplo para de leer un libro o mirar tele, y por otro lado, ayudan a decorar. Las propuestas son variadas y se pueden adaptar según el estilo de diseño de cada dormitorio: con capitoné, tachas, madera a la vista y también lisos. A continuación te mostramos varios ejemplos divinos.
Algunos materiales para realizarlos pueden ser:
Cabeceros tapizados en géneros
Por ejemplo de algodón, son muy confortables y además son versátiles. Por eso también son los más elegidos ya que se pueden realizar en diferentes diseños, texturas y colores. Por lo general existe la idea que se ensucian mucho porque no se pueden lavar, pero hoy se manejan distintas opciones como son las fundas, para permitir que sean desmontables y así poder lavarlas.
Cabeceros de madera
También se pueden realizar en este material y hay muchas formas de llevarlo a cabo. Algunos aprovechan para armar espacios de guardado, generando cajones en su interior. Otros reciclan maderas y hacen con ellas respaldos únicos. Sobre todo con este material, es muy común que se realicen diseños que generan continuidad entre los cabeceros y las mesas de luz quedando todo integrado. Pueden ser pintados en uno o más colores, con dibujos, etc.
Muros pintados
Estéticamente son muy lindos porque la variedad de formas y colores es interminable, pero funcionalmente no cumplen la segunda característica que nombrábamos, que es la de ser confortables. Se pinta directamente el muro y de la cama no hay ningún material que lo separe, por lo que se mantiene frío y duro al tacto.
Cabeceros de cuero o eco cuero
Suele ser el menos elegido. También existe mucha variedad y depende de sus características, puede quedar muy sofisticado o muy anticuado.
Fuente MDZ femme
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